Los destrozos de la riada

El pasado día 17 de Septiembre, se produjo una pequeña riada en la población que dejó bastantes destrozos en el campo y algún que otro susto.

Ya lo comentaba la prensa diaria, que Extremadura estaba en alerta amarilla por lluvias y tormentas, que dejarían hasta 30 litros por metro cuadrado en media hora.

Todo ocurrió cerca de las 13:00 horas, cuando empezó a caer lluvia fuerte que terminó con granizos bastante considerables (según algunas informaciones, 3 días después de la riada, aún quedaban granizos en los aledaños de la localidad).

La lluvia a su paso por los regatos, se llevó paredes y todo lo que encontraba por delante. En algunos lugares hay "portillos" de hasta 6 metros sin piedras, las cuales fueron arrastradas por el agua más de 100 m.

Algún que otro susto se llevaron también algunas personas en sus coches, que se salieron de la carretera debido a la gran abundancia de agua y fueron sacados por las grúas.

Pero bueno, a todo hay que buscarle la parte positiva y gracias a las lluvias caídas, la gran mayoría de charcas y pequeños lagos se han llenado casi en su totalidad.

Es el agua que veníamos deseando desde hace ya bastante tiempo, aunque no con la "violencia" que ha llegado.